Como bien decía Kenneth Waltz en su famoso libro, "El Hombre, el Estado y la Guerra", Rousseau se sitúa como pionero del Noerrealismo. Al destacar que el concepto de Voluntad General no es aplicable a la esfera internacional, lo que hace inviable el civismo y las virtudes políticas (elemento vertebrador de su teoría), las causas de la desigualdad permanecen en la escena internacional. Es decir, la estructura anárquica de la política internacional impide primero que se pase del Estado de Naturaleza al Estado Social y la civilización, y como el paso necesario para alcanzar el contrato social que lleve al hombre a un estado en que no exista el envilecimiento que trae la civilización, es que que exista primero ese estado de envilecimiento y civilización, el modelo de Rousseau para proporcionar Orden Político no sería posible. Es más, el Estado de Naturaleza internacional sería un estado de guerra al más puro estilo hobbesiano. Pero lo que en Hobbes ocurría entre individuos, en Rousseau ocurriría entre Estados. En ese sentido, Rousseau sería el primer pensador sobre Ciencia Política (quitando a Tucídides, que no teoriza al ser historiador) que de forma clara situaría la explicación de la Inseguridad Internacional en el nivel de la estructura, y no de la naturaleza humana o de las peculiaridades de cada Estado. (Ver este estupendo libro de Stanley Hoffman sobre el tema de Rousseau y las Relaciones Internacionales).
No obstante Rousseau también tiene cierto compenente de reforma de la Política Internacional. En mi opinión sus propuestas no son catalogables como de idealismo propiamente dicho. Su profunda comprensión sobre la naturaleza política se lo impide. Dentro de las visiones ya clásicas de la Relaciones Internacionales Rousseau, por su análisis, se situaría dentro de la Escuela Inglesa de Martin Wight o Heddeley Bull. En donde se mezcla el realismo de toda visión mínimamente seria para todo pensador sobre la sociedad humana en general y la política internacional en particular. Esto es, Rousseau contempla los componentes de sociedad (moral, costumbre, etc) y las relaciones de intercambio económico como una oportunidad para escapar al Estado de Naturaleza. Esto último también lo acerca al concepto de Interdependencia Compleja (que también acepta al realismo y a la lucha por el poder en su seno). Los dos puntos señalados, Sociedad e Interdependencia, darían cierta posibilidad para que el concepto de Voluntad General sea aplicable en cierta medida. Rousseau llegó a esas conclusiones observando los ejemplo de la Liga de Anfictionía en la Grecia Clásica, al Sacro Imperio, o a los Estados Generales Holandeses.
Rousseau también escapa del vulgar idealismo al dar cuatro reglas esenciales que deben cumplirse, para que dicha comunidad o confederación de Estados sea viable: todos los Estados importantes deben formar parte, los acuerdos y leyes que se establezcan han de ser vinculantes, debe haber una fuerza coercitiva que obligue a los Estados, y que nadie podrá abandonar esa agrupación. Es decir, lo que hoy llamaríamos una suerte de Seguridad Colectiva.
El tema es más complejo y tiene bastante miga, aunque no me extenderé sobre ello en esta entrada. No obstante, basta decir que Rousseau, debido a su mezcla de ensueño y profunda comprensión de la realidad política, es un antecedente a la magistral mirada y propuesta de Wilson y sus 14 puntos y Sociedad de Naciones. Autor no superado en esta clase de asuntos de política internacional. Wilson no era un mero soñador, él era Catedrático de Ciencia Política y era perfectametne consciente que su impresionante nuevo edificio de Relaciones Internacionales sería imposible de aplicar sin un uso decidido de la fuerza. Pero en su determinación de implicar a EE.UU. en ese nuevo proyecto perdió la salud, y con ello su presidencia. Wilson, como Rousseau, sabía perfectamente que sólo el poder podía garantizar semejante confederación mundial. Sus propuestas no eran solamente un ejercicio brillante y preclaro sobre la teoría de la política internacional, sabía que sólo sin reunirse ciertas condiciones políticas y estratégicas muy específicas, dicha propuesta no sería mas que papel mojado, y que a la postre sólo traería más inestebilidad e inseguridad internacional. Esa es la diferencia entre Wilson y Rousseau, y la manada de idealistas que malograron el proyecto de Wilson con sandeces como el Tratado de Locarno o el Pacto Briand-Kellog, o tal y como proponen ciertos académicos actualmente.
Abajo he colgado las mejores clases sobre la filosofía de Rousseau que hay en Youtube, realmente son excelentes y escucharlas fue un placer inmenso.
18. Democracy and Participation: Rousseau's Discourse
19. Democracy and Participation: Rousseau's Discourse
20. Democracy and Participation: Rousseau's Social Contract, I-II
5. Rousseau: Popular Sovereignty and General Will
6. Rousseau on State of Nature and Education
The History of Political Philosophy: Jean-Jacques Rousseau (Lecture 6, 1/2) by David Gordon
The History of Political Philosophy: Jean-Jacques Rousseau (Lecture 6, 2/2) by David Gordon